Feminista y libertaria, dueña de su vida y su dolor, coleccionista de ausencias y escritora sin par. Así fue, así es, Mary Wollstonecraft Godwin, Mary Shelley, la mano que mece la cuna de Frankenstein.
Charlotte Brontë, la mujer que se enamoró de su profesor y que rechazó hasta 4 propuestas de matrimonio para acabar casándose contra la voluntad de su padre además de escribir una de esas novelas que no puedes dejar de leer: Jane Eyre.
Aphra Behn, espía de Carlos II (entre otras cosas...), primera escritora profesional de la historia de la literatura en inglés, autora de la primera novela antiesclavista y de la primera novela espistolar. Conservadora por su ideología y libertaria por sus actos, sin duda, una mujer terriblemente interesante.
He aquí un ensayo feminista furioso y encendido, apasionado e irónico, en defensa de las mujeres, víctimas todas ellas de la plumas masculinas de su tiempo.
No estaba loca. Pero había en su cabeza algo parecido a la locura, algo tal vez inherente a sus sueños y a su talento, quien sabe...