El que pierde, gana: lo dijo Graham Greene y no se refería sólo a los juegos de azar.
El que pierde, gana es una novela corta que cuenta unas pocas semanas en la vida de un tipo corriente, un contable divorciado que está a punto de casarse por segunda vez ¡qué inesperado todo lo que le sucede (y lo que él mismo hace que suceda) en tan poco tiempo!.
Si no eres un buen conocedor de la obra de Graham Greene cabe que ni tan siquiera hayas reconocido el título de una de sus novelas en el de esta noticia pero ahí está: El que pierde, gana. Es una novela corta que pasa por ser una obra menor del mítico escritor-espía (o espía-escritor) británico pero a nosotros se nos antoja la mar de interesante tanto si ya has deborado las novelas más importantes de Greene (El Tercer Hombre, Historia de una Cobardía, El Americano Impasible…) como si no lo has hecho todavía porque estamos seguros que como lector de Greene disfrutarás mucho de El que pierde, gana y también de que es una novela ideal para descubrir el universo de este magnífico escritor; además, es una novela que viene muy a cuento de temas que están hoy de candente actualidad.
Los perdedores son los que ganan, dije, pierda éstas por mi, es todo lo que me queda.
El que Pierde Gana cuenta la historia de un tipo corriente con un trabajo corriente, un hombre divorciado como tantos que se ha enamorado y que se casa por segunda vez; hasta aquí nada de particular, a partir de aquí, todo: el tipo corriente en cuestión trabaja en una oficina como contable auxiliar y su vida parece ser una oda al aburrimiento hasta que lo llaman a la planta superior y conoce, personalmente, al director, dueño y señor de la empresa para la que trabaja.
Los planes de boda de nuestro protagonista, el señor Bertram, se dan la vuelta como un calcetín ante las propuestas de su jefe, popularmente conocido entre sus empleados como el Gom; a partir de ahí Graham Greene nos lanza a una aventura en la que descubrimos cosas tan de hoy en día (de ayer y de siempre…) como los líos entre socios en una gran empresa, lo atractivo que puede resultar el dinero y como puede cambiarlo todo para bien y para mal, la naturaleza del amor, de la adicción al juego y también de lo que supone ser humano pero, por encima de todo, es una historia para descubrir el valor del libre albedrío.
Cómo nos derrotan con esos silencios: uno no puede repetir un silencio o desmentirlo como una palabra.
Esta pequeña novela se lee en poco más de un par de horas si lo que quieres es disfrutarla de un tirón y te sorprenderá el modo en el que, en tan breve espacio de relato, Greene mueve a sus personajes; en realidad ellos apenas evolucionan (no hay tiempo real para ello, el relato se desarrolla en unas pocas semanas, entre los días previos a la boda de Bertran y Cary y los últimos días de su luna de miel) pero sus decisiones y acciones ante lo que les acontece hacen que la idea que nos formamos de cada uno de ellos al principio de la novela arroje una foto muy distinta a la que tenemos al terminar de leerla.
El que Pierde, Gana es una novela tan bien estructurada y tan bien ambientada como todas las de Graham Greene, llena de personajes perfectamente dibujados y de aventuras propias, en ocasiones, del absurdo más absoluto ¿te jugarías el porvenir en la mesa de un casino? ¿qué podrías perder, además de tu dinero, o ganar, además del dinero de otros? la respuesta a estas preguntas es a la vez más compleja y más simple de lo que imaginas y el Sr Bertram la encuentra cuando se da cuenta de lo que de verdad le importa…
Soy demasiado viejo. Los jóvenes me llamarían cínico. A la gente no le gusta enfrentarse con la realidad. No le gusta el sentido común. Hasta que la edad le obliga a aceptarlo.
No diremos más, porque no queremos desvelarte los detalles más jugosos de la trama de esta novela, sería imperdonable hacerlo en cualquier caso pero en el de una novela corta como ésta más, si cabe, sólo te diremos algunos lugares, objetos y emociones que son esenciales en esta novela, si quieres ver cómo confluyen, tendrás que leer El que Pierde Gana, de Graham Greene: amor, rutina, élite, dinero, préstamo, casino, juego, celos, infidelidad, yates, puertos, hoteles de lujo, luna de miel, whisky, negocios, traición, fidelidad…